Cómo curar los cogollos de cannabis, la guía definitiva

El curado del cannabis es el paso final, aunque delicado, para conseguir la máxima calidad posible de una cosecha. Aunque muchos cultivadores se centran sobre todo en las fases de cultivo y secado, es el proceso de curado el que eleva los cogollos al mejorar su potencia, sabor y suavidad. El curado permite la descomposición lenta de la clorofila y los azúcares residuales que, si no se curan, pueden provocar un humo áspero y sabores a hierba. Este proceso gradual no solo preserva los terpenos, los compuestos responsables del aroma y el sabor, sino que también estabiliza cannabinoides como el THC y el CBD.

Por qué el curado es esencial para la calidad del cannabis

Cuando se hace correctamente, el curado puede aumentar la potencia del cannabis al permitir que el THC se desarrolle plenamente. Además, evita la formación de moho y bacterias al distribuir uniformemente la humedad restante en los cogollos. En resumen, el curado transforma el cannabis crudo, recién secado, en un producto más suave y sabroso, con una vida útil más larga. Sin un curado adecuado, incluso el cannabis más cuidadosamente cultivado y secado puede no alcanzar todo su potencial.

¿Qué es el curado y por qué es importante?

El curado es el proceso de eliminar lentamente la humedad restante de los cogollos de cannabis una vez secos. A diferencia del secado, que elimina la mayor parte de la humedad superficial, el curado actúa sobre la humedad aún atrapada en el interior de la flor.

El proceso de curado también preserva los delicados terpenos. Los terpenos son compuestos muy volátiles responsables del aroma de la planta. Sin un curado adecuado, los terpenos se degradan, dando lugar a una experiencia menos sabrosa. Además, cannabinoides como el THC y el CBD siguen madurando durante el curado, lo que aumenta la potencia general de los cogollos. Al curar el cannabis, los cultivadores pueden garantizar un producto final más suave, aromático y duradero.

La ciencia del curado del cannabis

El curado es algo más que un proceso de secado lento del cannabis, es una transformación bioquímica. A medida que el cannabis se cura, la clorofila residual empieza a descomponerse, eliminando el sabor «verde» o a hierba que pueden tener los cogollos no curados. También se degradan los azúcares y almidones, que pueden hacer que el humo sea áspero. Esta descomposición mejora tanto el sabor como la suavidad del producto final.

Las mejores condiciones para curar el cannabis

El curado del cannabis requiere un control ambiental preciso para obtener los mejores resultados. El entorno de curado ideal es un lugar oscuro y fresco con una circulación de aire mínima, ya que el exceso de luz, calor o flujo de aire puede degradar los terpenos y cannabinoides. La temperatura debe mantenerse entre 18-21°C (65-70°F) para evitar un secado excesivo, mientras que la humedad relativa debe mantenerse entre el 55-65%. Este nivel de humedad permite que la humedad salga lentamente de los cogollos sin causar moho.

Los tarros de cristal sellados son los recipientes preferidos para el curado, ya que ayudan a regular la humedad y protegen los cogollos de la exposición a la luz. Se desaconsejan los recipientes de plástico, ya que pueden afectar al sabor y contribuir a problemas de retención de humedad. Si te aseguras de que el entorno cumple estas condiciones, preservarás la integridad de los terpenos, los cannabinoides y la calidad general de los cogollos.

Guía paso a paso para curar el cannabis

Los pasos correctos para curar cogollos de marihuana son sencillos de seguir, pero a veces podemos perdernos de alguna manera. Aquí puedes encontrar una guía fácil de seguir para lograr el éxito en esta delicada tarea.

1. Preparación de los cogollos

Antes de iniciar el proceso de curado, es esencial que los cogollos estén bien secos. Los cogollos que se sienten secos al tacto, pero que aún contienen humedad interna, son ideales para el curado. Para comprobarlo, doble suavemente un pequeño tallo; si se rompe limpiamente, los cogollos están listos para el curado. Si se dobla sin romperse, deje más tiempo de secado para evitar el moho durante el curado.

2. Selección de los recipientes

Los tarros de cristal son el estándar de oro para el curado del cannabis. Su cierre hermético mantiene un nivel de humedad estable y protege los cogollos de los contaminantes externos y del exceso de aire. Evite los recipientes de plástico, ya que pueden afectar negativamente al sabor y pueden favorecer la retención de humedad excesiva, lo que provoca la aparición de moho.

3. Llenado de los tarros

Al llenar los tarros, es importante que los cogollos no estén muy apretados. Si se llenan demasiado, se restringe la circulación del aire y se corre el riesgo de que se forme moho. Deje aproximadamente un 25% del tarro vacío para permitir una circulación de aire suficiente en el interior del tarro, manteniendo al mismo tiempo un cierre hermético.

4. Sellado y almacenamiento de los tarros

Después de llenar los tarros, ciérralos y guárdalos en un lugar oscuro con humedad y temperatura estables, como se ha indicado anteriormente. Los tarros deben mantenerse alejados de la luz directa para evitar la degradación de los cannabinoides. Asegúrese de que está manteniendo el rango de humedad ideal de 55-65% para permitir un curado lento y uniforme.

5. Ventilar los cogollos

Durante las dos primeras semanas de curación, es esencial airear los tarros. Esto implica abrir los tarros durante unos minutos una o dos veces al día para liberar la humedad acumulada y reponer el oxígeno. El eructo ayuda a evitar la formación de moho y favorece un secado uniforme. Después de las dos semanas iniciales, puedes reducir las ventilaciones a una vez cada pocos días.

6. Control del moho

A lo largo del proceso de curado, inspeccione regularmente los cogollos para detectar cualquier signo de moho. Si percibe un olor desagradable o ve manchas blancas o grises, retire inmediatamente los cogollos afectados y vuelva a evaluar los niveles de humedad dentro de los tarros. El uso de paquetes de humedad puede ayudar a mantener un entorno óptimo y evitar el moho.

¿Cuánto debe durar el proceso de curado?

El proceso de curado suele durar entre 2 semanas y 6 meses, dependiendo de la calidad deseada y del desarrollo del sabor. Para la mayoría de los cultivadores, se recomienda un tiempo mínimo de curado de 2 a 3 semanas, ya que esto permite el tiempo suficiente para la descomposición de la clorofila y la mejora de los terpenos y cannabinoides.

Para los que buscan un sabor y una suavidad óptimos, un periodo de curado más largo -entre 4 y 8 semanas- puede dar como resultado un producto notablemente mejor. Algunos entendidos prefieren curar sus cogollos durante 6 meses o incluso más, ya que este tiempo prolongado permite que aflore toda la complejidad del cannabis. Sin embargo, hay que tener cuidado de no prolongar el curado más allá del punto en que la humedad haya desaparecido por completo, ya que los cogollos pueden secarse demasiado y volverse quebradizos con el tiempo.

En última instancia, el tiempo de curado adecuado depende de sus preferencias personales. Mientras que a algunos les gusta un curado más corto para obtener un sabor más fresco, otros apreciarán la profundidad y suavidad de un curado más prolongado.

Errores comunes que hay que evitar durante el curado

El curado es un proceso delicado que requiere atención al detalle, y varios errores comunes pueden afectar negativamente al producto final. He aquí algunos escollos que conviene evitar:

1. Curar cogollos demasiado húmedos

Si los cogollos no se han secado lo suficiente antes de entrar en la fase de curado, el exceso de humedad puede provocar la aparición de moho en el interior de los tarros. Asegúrese siempre de que los cogollos estén bien secos, con los tallos quebrándose en lugar de doblándose.

2. Embalaje excesivo dentro de los tarros

Si los tarros están demasiado apretados, se restringe la circulación del aire, lo que aumenta el riesgo de formación de moho y un curado desigual. Los cogollos necesitan espacio para respirar, así que deja alrededor del 25% del tarro vacío.

3. Ventilado o circulación de aire inconsistentes

Si se descuida la ventilación de los tarros, especialmente durante las dos primeras semanas, puede quedar atrapada la humedad en su interior, provocando que los cogollos se humedezcan demasiado. El ventilado permite que salga el exceso de humedad, asegurando un curado uniforme y evitando el moho.

4. Almacenamiento en malas condiciones

Las condiciones de almacenamiento inadecuadas, como la humedad elevada, la exposición a la luz o las temperaturas fluctuantes, pueden degradar los cannabinoides y los terpenos. Guarda siempre los frascos en un lugar fresco y oscuro para mantener la calidad de tu cannabis.

Si evitas estos errores comunes, podrás conservar todo el potencial de tu cosecha y garantizar un producto final suave y sabroso.

Señales de un cogollo bien curado

Un cogollo de cannabis bien curado puede reconocerse por varias características clave, todas las cuales contribuyen a la calidad del producto final. Esto es lo que debes buscar para determinar si tus cogollos se han curado correctamente:

1. Humo suave

Uno de los primeros indicadores de un cogollo bien curado es lo suave que resulta al fumarlo. La aspereza suele ser un signo de curado incompleto, ya que la clorofila residual y los azúcares no se han descompuesto por completo.

2. Aroma y sabor intensos

Los cogollos curados correctamente deben tener un aroma fuerte y agradable, ya que se conservan los terpenos. El sabor también debe ser rico y pronunciado, sin ningún sabor «verde» o a hierba.

3. Niveles óptimos de humedad

Los cogollos deben estar secos al tacto, pero no quebradizos. Al apretarlos, deben ofrecer una ligera resistencia antes de romperse. La humedad interna se habrá distribuido uniformemente, asegurando una quemadura consistente sin desmoronarse hasta convertirse en polvo.

4. Potencia

El cannabis bien curado debería mostrar toda la potencia de sus cannabinoides, en particular el THC y el CBD. El proceso de curado permite que estos compuestos se estabilicen, lo que produce un efecto más potente y duradero.

Al reconocer estos signos, puedes estar seguro de que tu cannabis se ha curado correctamente, lo que conduce a una experiencia más agradable y eficaz.

Productos para mejorar el proceso de curado

El curado es un proceso fácil de hacer, pero necesita paciencia y ser metódico, además se puede mejorar utilizando las herramientas adecuadas, como las que te ofrecemos.

Tijeras de manicura

Estas tijeras de manicura son la herramienta perfecta para recortar las plantas con facilidad y precisión. Con una punta fina, recta o curva, ofrecen un excelente control para un trabajo detallado, lo que las convierte en un aliado ideal para limpiar y manicurar tus cogollos con precisión y facilidad.

Malla de secado perforada

La malla de secado perforada es una solución excelente para secar las flores cosechadas. Con su gran capacidad de almacenamiento y su óptimo flujo de aire, garantiza un proceso de secado uniforme y eficiente, lo que lo convierte en un elemento imprescindible para los cultivadores que buscan maximizar sus resultados tras la cosecha.

Peladora de cogollos Bowl Tumble

La peladora de cogollos Bowl Tumble es la compañera manual ideal para los cultivadores que buscan una experiencia de recorte sin esfuerzo. Esta máquina limpia los cogollos en cuestión de segundos, funcionando silenciosamente sin necesidad de electricidad. Conocida como la «ensaladera», ofrece un pelado perfecto con solo unas vueltas de la manivela, lo que la convierte en una máquina eficiente y relajante para los cultivadores que quieren ahorrar tiempo y, al mismo tiempo, obtener grandes resultados.

Boveda

Los sobres de curado Boveda están diseñados para mantener los niveles precisos de humedad necesarios para un proceso de curado ideal. Estos sobres están disponibles en dos rangos de humedad, 58% y 62%, lo que le permite elegir el nivel adecuado en función de la cantidad de flores. Boveda garantiza un control constante de la humedad, evitando el secado excesivo o la retención de humedad, dando a tus flores el toque final perfecto para un resultado suave, sabroso y bien conservado.

Notas finales

El curado adecuado de los cogollos de cannabis es un paso fundamental en el proceso posterior a la cosecha, y desempeña un papel importante a la hora de determinar la calidad general del producto final. Cuando se hace correctamente, el curado conserva toda la potencia de los cannabinoides, realza el sabor y el aroma protegiendo los terpenos, y garantiza una fumada más suave y agradable.

Siguiendo las técnicas adecuadas y evitando los errores más comunes, es posible maximizar el potencial de la cepa, dando lugar a un producto de máxima calidad que ofrece mejor potencia, sabor y vida útil. Recuerde, la paciencia es la clave. Tómate el tiempo necesario para curar correctamente, y los resultados hablarán por sí solos.

Espero que te haya gustado este artículo sobre como curar los cogollos de marihuana correctamente, recuerda visitar los artículos anteriores de la trilogía de la cosecha, cuando cortar las plantas de cannabis, y como secar la marihuana, también síguenos en nuestra newsletter y redes sociales.

Brais Nieto

Fundador de Experiencia Natural, creativo y emprendedor, diseñador, master en grower y marketing. Por una normalización de todas las plantas y sustancias primando pacientes y usuarios.