Sustratos para cultivo hidropónico

Pese a que parece un sistema muy novedoso, la hidroponía tiene mucha historia. Hay fuentes que datan esta técnica de cultivo hacia el 380 ante de Cristo, cuando los aztecas comenzaron a realizar las primeras soluciones fertilizantes sin utilizar tierra como base de cultivo. Hoy en día, este sistema de cultivo ha evolucionado a niveles insospechables y es una de las técnicas más puntera de horticultura. 

Características de los sustratos para hidroponía

Los sustratos para hidroponía deben de llevar a cabo la importante labor de sostener la planta para que las raíces entren en contacto directo con el agua o solución nutritiva. De esta forma, el sistema radicular de las plantas puede desarrollarse de forma efectiva: las raíces permanecen al resguardo de la luz, por lo que se recrean condiciones similares a las que la raíz tendría en cultivo bajo tierra. 

Dentro de las diferentes posibilidades de sustratos para hidroponía se pueden encontrar sustratos orgánicos, con presencia de hongos y nutrientes base para el crecimiento de las plantas. Pero también es posible encontrar tipos de sustratos para hidroponía inertes, aquellos que no cuentan con carga nutritiva y pensados para que el cultivador agregue a la solución nutritiva los nutrientes necesarios para cada especie de planta. 

Sin concernir el tipo de sustrato que se utilice, es importante que este proporcione un nivel adecuado de oxigenación al sistema radicular. De lo contrario, las raíces no podrían desarrollarse de manera adecuada y penetrar en la solución nutritiva, lo que tampoco podría garantizar un aporte de nutrientes idóneo al cultivo. 

Tipos de sustratos para hidroponía

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En primer lugar, la arlita o arcilla expandida es el sustrato hidropónico por antonomasia, ya que está especialmente diseñado para este tipo de medios de cultivo. La arlita tiene forma de pequeñas bolas y fomentan una oxigenación óptima en el sustrato. En este sustrato las raíces tienden a expandirse de forma óptima si el flujo de agua en el hidropónico está bien establecido. 

Además de la oxigenación, la arlita permite un excelente drenaje en el cultivo. De este modo, con este sustrato para hidropónico, el cultivador evitará que el agua quede retenida en las raíces y sustrato y terminar por pudrir el sistema radicular. Se trata de un tipo de sustrato muy limpio, ya que impide la acumulación de algas en la solución nutritiva. Además, la arlita es reutilizable, por lo que es un tipo de medio compatible con la agricultura ecológica. 

La lana de roca también ofrece excelentes resultados en medios hidropónicos. Se trata de un método de cultivo muy utilizado porque también promociona una excelente oxigenación y retención de agua. No obstante, la lana de roca requiere un poco más de experiencia en la instalación que la arlita, por ejemplo. De este modo, es preciso humedecer el bloque de lana de roca, formato en el que viene el sustrato, para que de lugar al material que se va a utilizar para sostener las plantas.

Por último, la fibra de coco también puede ser utilizada como sustrato hidropónico. Este tipo de sustrato procede de la fibra existente entre el fruto y la cáscara de coco. Se trata de un sustrato hidropónico totalmente ecológico, con alta oxigenación y que facilita el drenaje del agua.